El equipo del festival de nuevos espacios y lenguajes escénicos de San Sebastián LABO XL no podía haber concebido mejor clausura para su tercera edición. El programa del último de día reservaba la gran traca final con una inmensa artista, ‘La Chachi‘, que ha dejado embelesado al público donostiarra.
María del Mar Suárez, dramaturga, actriz y bailaora conocida como ‘La Chachi’, presentaba su tercera obra, tras su primer largo en solitario hace cuatro años, ‘La gramática de los mamíferos’ y ‘La Espera’ de 2019 (premio Ateneo al mejor espectáculo de danza 2019). ‘Los inescalables Alpes, buscando a Currito’, que se podrá disfrutar también dentro del XXIX Festival de Otoño de Madrid, está muy lejos de pasar desapercibido, por su carácter rompedor, intenso e hipnótico.

Brillante en su escritura y magistralmente interpretado, esta búsqueda comienza como una peregrinación, un camino (¿o calvario?) para recorrer durante la romería del Rocío. La artista, tras haber realizado una reducción, una concentración de la misma naturaleza del arte flamenco, nos ofrece lo más inesperado de su esencia. ‘La Chachi’ reordena este baile, invirtiendo su estructura principal, la verticalidad, para llevarlo hacia un nuevo terreno, la horizontalidad. Un flamenco contemporáneo que emociona. A ras del suelo, más humano, visceral y catártico.
El viaje empieza como una promesa, en eco a la canción que acompaña el espectáculo y que se repite como un mantra. La salvación está al final del recorrido, pero como es habitual, si el inicio de la travesía se conoce de antemano, la dificultad del trazado solo se descubre a posteriori. ‘La Chachi’ tiene que empezar a luchar y los besos iniciales, al suelo, a la misma tierra, se convierten en arañazos para poder avanzar, aunque sea solo un milímetro.
Taconeos laterales, con la expresividad de la lucha en su rostro, la artista avanza a duras penas. Cada falange de la mano de la artista puede expresar más emociones y emociones que muchas actrices con páginas enteras de diálogos. Lo que comenzó como un objetivo místico parece transformarse en una lucha más carnal, la salvación puede que esté en el otro. Y ‘La Chachi’ transita del amor místico al profano.

La introducción de la técnica del Krumping, originario de Los Ángeles, en la pieza (más conocido como Krump y caracterizado por movimientos extremadamente expresivos y muy enérgicos) es una idea de genio. La caminante mística, transformada en profana mortal, recuerda el cuadro de Julio Romero de Torres de 1908: dos mujeres, casi idénticas, encuadran a otra en segundo plano y en la misma posición que la bailaora, con esas mismas flores que son, al mismo tiempo, celebración de la búsqueda y constatación de su fracaso. Arrebatadora ‘La Chachi’.
Y por si fuese poco, LABO XL clausuró el certamen con Bárbara Sánchez y su espectáculo Mystic Bacala. Un aquelarre musical, a ritmo de exaltada cultura de bacalao valenciano, en un éxtasis compulsivo de empoderamiento femenino. ¿Quién da más? Deseando que llegue ya la cuarta edición.