Free Fire, Llega de noche (It Comes at Night), Regreso a Montauk (Rückkehr nach Montauk) y The Wall


La cartelera va a estar de lo más emocionante con estos cuatro directores que han decidido jugar con los géneros tradicionales y darles un toque personal. Aunque parezcan distantes en sus temáticas, las cuatro películas, en la más pura vena del cine de autor actual, muestran en logrados ejercicios de estilo una visión pesimista del mundo con un individuo, cada vez, más aislado y encerrado en sí mismo.

FF1

Al modo más azabache del cine negro: el británico Ben Wheatley traslada a los años 70 este thriller descocado, Free Fire, sobre una compraventa de armas para un futuro atraco, entre unos criminales, estilosos y catetos, con casi un único lugar de acción: una fábrica abandonada en unos muelles de Brighton. Desbordante de humor, con inspiradas persecuciones en sólo tres metros, y más tiros y fuego que en las Fallas de Valencia, la película encantará a los fieles seguidores de Tarantino, Peckinpah y Monty Python. Moraleja: no te fíes de tus compañeros de “trabajo”.

FF0

Al más puro intenso estilo melodrama: tras toda una serie de películas históricas, el alemán Volker Schlöndorff, de la mano del escritor Colm Tóibín, se traslada a la gran manzana para contar el rencuentro entre un exitoso escritor y una de sus antiguas amantes. Al ser  Nina Hoss y Stellan Skarsgård las protagonistas, ya se anuncia el color de la profunda desesperación sentimental que arropa este Regreso a Montauk (lugar que en amerindio significa el final de las tierras), con sus protagonistas encerrados en un espacio mental, el pasado. Para todos los que disfrutan con las películas de Max Ophüls y los libros de Stefan Zweig. Moraleja: no te fíes de los recuerdos.

En el más intenso suspense de la guerra: Doug Liman se crece con cada película (de hecho, Al filo de la guerra, ya era una excepcional vuelta de tuerca al cine de ciencia ficción), con The Wall presenta un impecable ejercicio de estilo que consigue encerrar a su protagonista, en pleno desierto, frente a un francotirador iraní con sólo un muro de por medio. Con sólo un actor (Aaron Taylor-Johnson) y medio, Doug Liman arremete contra la ineficacia de las intervenciones militares en tierra extranjera y la perversidad de sus consecuencias. Moraleja: no te fíes de tu gobierno.

TW

Y en el más inspirado y brillante generó del terror, la gran sorpresa de la segunda película del guionista y director americano, Trey Edward Shults, Llega de noche. Si ya en su debut Krisha se abordaba el tema de la familia, en Llega de noche, lo borda. Bajo la apariencia de un film de epidemia que ha aislado en su granja a una familia, Trey Edward Shults radiografía, en realidad, a toda la sociedad de su país. En un creciente impulso paranoia que hace sospechar de todo el mundo y una violencia desatada, la película es una verdadera joyita del cine de terror. En esa granja tendrán que convivir dos familias, expuestas al exterior (un horror que existe pero que en ningún momento se hace presente) y un interior bajo permanente tensión (que tampoco es mejor). Moraleja: salvo de tu familia, no te fíes de nadie.

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s